5 cosas ilegales que los profesores no deberían hacer
La misión del maestro es muy compleja. Es un funcionario por un lado y un ser humano por el otro. Es responsable ante la sociedad, que le confía la educación de su juventud. De hecho, trabajar con niños requiere respeto por sus confidencias. En otras palabras, debe tener la ley en alta estima al igual que sus estudiantes.
Por eso te presentamos 5 cosas ilegales que los maestros no deben hacer, incluso si los sistemas legislativos, los organismos locales y federales son diferentes en diferentes países:
1) Divulgación de datos de estudiantes
Los profesores tienen acceso a una gran cantidad de información sobre los estudiantes y sus familias. La ley protege los datos personales porque son privados. En este sentido, debe tomar solo lo necesario para realizar su trabajo, y debe obtenerlo directamente de los padres o tutores. Pero en cualquier caso, debe mantener esta información segura.
Además, el uso de las redes sociales tiene trampas que es importante conocer. Por supuesto, todo lo que compartimos en Internet es de dominio público. Es por eso que los profesores deben evitar publicar datos personales sobre sus estudiantes en línea y mantener correspondencia con ellos en estas redes. Es mejor utilizar la dirección de correo electrónico que ofrecen las juntas escolares.
Los maestros no deben publicar información personal sobre las familias de sus estudiantes como parte de un estudio. El incumplimiento de la privacidad del alumno y su familia puede constituir una ofensa si los padres lo solicitan al tribunal correspondiente.
2) Monitoreo de fallas
La facultad es responsable de todas las actividades escolares para los estudiantes, incluidas las excursiones y los viajes de estudio. La supervisión de los alumnos constituye una obligación de servicio de los profesores, debiendo participar cada uno de ellos. Esta supervisión debe llevarse a cabo de forma continua, durante el período durante el cual el alumno está confiado a la escuela o durante un evento fuera de la escuela. Él es responsable cuando un estudiante ha causado daño a un compañero de clase o si un tercero ha lastimado a un estudiante.
Ejemplo: Un estudiante lesionó a otro estudiante en el ojo con una piedra durante el recreo. El Tribunal observó una gran negligencia por parte de los profesores.
3) Falta de respeto
La relación profesor-alumno ha cambiado mucho en las últimas décadas. Sin embargo, el respeto siempre ha sido y debe seguir siendo recíproco. El profesor no solo transmite conocimientos a una clase, sino que debe establecer un contacto cálido. Si el alumno se siente respetado, se le da una gran libertad para aprender. Además, también deben tenerse en cuenta la edad, la cultura, el género y las condiciones socioeconómicas del estudiante. Es decir, en las escuelas, el docente debe tener en cuenta a alumnos de otras culturas.
Pero las cosas empeoran mucho cuando el profesor tiene sexo con un alumno.
4) Ir más allá de los límites de la disciplina
Los maestros se encargan de la disciplina de los estudiantes en su clase para garantizar un tiempo de aprendizaje de calidad y un mejor desempeño.
El profesor puede y debe intervenir y disciplinar a sus alumnos si su comportamiento o actitud perturba la calidad de la enseñanza o la armonía de la clase.
En caso de problemas de disciplina, el maestro puede comunicarse con los padres del niño. Debe contactarlos antes de que la disciplina (o la falta de disciplina) se convierta en un problema grave. La intervención temprana puede permitir que el niño cambie su comportamiento. Sin embargo, las leyes han establecido un límite a la forma en que los maestros pueden disciplinar a sus estudiantes y manejar los incidentes en función de su competencia.
5) Castigar a los estudiantes
Los maestros usan el castigo para hacer cumplir las reglas, obedecer y distinguir el bien del mal. Pero este castigo hace sufrir al alumno. Ella lo enfureció, lo hizo desear venganza y lo hizo dejar a un lado su calma, su sociabilidad y su simpatía. Sin embargo, las leyes se inclinan a favor de los estudiantes cuando los maestros traspasan la línea al imponer un castigo. Las directrices mencionan claramente la importancia de evitar cualquier acto que endurezca los castigos o cualquier actividad en nombre de los castigos que hiera sus sentimientos.
Ejemplos:
Si un estudiante usa un teléfono en clase, lo cual va en contra de la política de la escuela, el maestro puede quitárselo y devolverlo al final del día. Si se niega a entregar su teléfono, no podemos obligarlo, pero notifíquelo a la administración escolar. Asimismo, los docentes deben devolver los artículos confiscados el mismo día, sin causarles ningún daño.
Si un estudiante molesta a sus amigos con mensajes de texto, el maestro no debe leer estos mensajes en presencia de otro maestro o incluso del director de la escuela. Asimismo, no puede mostrar ningún otro contenido privado relacionado con el alumno.
Un buen maestro debe ser un buen ser humano y esta es la mejor forma de formar a un alumno o corregir errores.
Deben entender que cada alumno es una persona diferente, que merece respeto al darle suficiente espacio personal.
Los maestros deben dedicar más tiempo a leer las pautas o leyes a seguir al hacerse pasar por maestros responsables para evitar incidentes futuros.